Otros tipos de voces: Los castrati


Sesión lunes 30 y martes 31: PLAZO REALIZACIÓN DE LA ACTIVIDAD HASTA EL 12 DE ABRIL

LEE CON ATENCIÓN ESTE TEXTO DE LA HISTORIA DE LOS CASTRATI, VISUALIZA LOS VÍDEOS Y RESPONDE A LAS PREGUNTAS DEL CUESTIONARIO QUE HAY AL FINAL

Los primeros músicos de la historia en alcanzar la categoría de estrellas fueron los castrati, sobre cuyas voces se basaba la ópera italiana en el S. XVIII. Un castrato era una maravilla vocal, un precioso instrumento musical vivo, de una belleza y extensión sombrosas. En el siglo XVI cuando, tras la prohibición del papa Pablo IV de que las mujeres cantaran en San Pedro, los castrati hacen su aparición cantando en las iglesias. 
El hecho de que las mujeres tuvieran prohibido cantar en las iglesias obligaba a los compositores a utilizar como voces agudas las voces de los niños educados al amparo de las diversas capillas. Pero cuando los niños crecían, perdían su voz blanca y su registro agudo.

Así, en el S. XVI, se inició la costumbre en el sur de Europa de castrar a los niños que poseían dotes para la música antes de que comenzaran a mudar la voz. La ablación de los genitales impedía el crecimiento de la laringe, y por tanto, de las cuerdas vocales, manteniendo una voz blanca de niño en un cuerpo adulto con la capacidad torácica y pulmonar de un hombre. El joven castrato recibía durante diez años y de forma gratuita una completa instrucción musical, literaria e histórica. Después, eran normalmente adoptados o protegidos por algún alto personaje de la aristocracia o de la iglesia que se aseguraba de proporcionarles una brillante carrera.

Su timbre agudo y cristalino, unido al virtuosismo técnico y a la potencia de sus voces, hizo de los castrati los cantantes más aclamados durante los S. XVII y XVIII en los teatros de ópera italianos y en buena parte de Europa. Compositores como Monteverdi, Haendel, Gluck, Mozart o Rossini, confiaron a los castrati los papeles de héroes y dioses de sus óperas.

La limpia ejecución de las más intrincadas coloraturas, complejas acrobacias vocales, los enorgullecía más que la tesitura aguda, femenina, de sus voces. Podían sostener una nota durante minutos enteros, y en muchas ocasiones se enzarzaban en duelos con algún instrumentista de viento, con el que rivalizaban en resistencia para admiración del público.

En teoría, las castración estaba prohibida y aun castigada con extraordinaria severidad, pero en la práctica se admitía si se alegaba que no era intencionada, sino que se había producido por causas accidentales, fuera esto verdad o no.

La existencia de los castrati se conoce desde la antigüedad y están documentados como cantores al servicio de la iglesia desde el S. XII, como consecuencia de la prohibición de voces femeninas en la liturgia, aunque durante siglos los encargados de sustituir a las mujeres fueron los falsetistas, varones expertos en imitar el timbre y la extensión vocal femeninas. A comienzos del S. XVII los castrati italianos sustituyeron definitivamente a los falsetistas.

Entre los castrati más famosos figuran Gaetano Maiorano, Caffarelli, aunque el más grande y famoso de todos fue Carlo Broschi (1705 – 1782), conocido como Farinelli, de quien se decía podía recorrer tres octavas haciendo trinos sobre cada nota y hacer hasta 250 notas diferentes y mantenerse cantando sin perder potencia ni aire más de 30 segundos. Farinelli terminó su carrera en Madrid, al servicio del rey Fernando VI, a quien según se dice, cantaba todos los días las mismas arias para calmar sus “ataques de melancolía”.

En 1770 el Papa Clemente XIV autoriza a las mujeres a cantar en la iglesia y prohibe la castración.

El repertorio de los castrati es interpretado a menudo por contratenores, que se apoyan en una técnica de emisión especial para hacer vibrar las cuerdas vocales sólo en una parte de su longitud.

También existen voces excepcionales como los sopranistas, hombres adultos que han conservado de forma natural una voz de soprano.

Os dejo 3 vídeo. ESCUCHADLOS Y ASÍ OS PODÉIS HACER UNA IDEA DE CÓMO ERA LA VOZ DE LOS CASTRATI

- Ombra Mai fu: es un aria compuesta por Haendel para su ópera Jerjes y era cantada por un castrato. En este vídeo está cantada por la mezzosoprano italiana Cecilia Bartoli. 


- El segundo vídeo es el mismo aria Ombra Mai fu cantado por el contratenor Philippe Jaroussky. 






-Por último, un fragmento de la película Farinelli, con el que os podéis hacer una idea de cómo era una ópera en el siglo XVIII y el gran éxito que tuvieron los castrati como cantantes.






RESPONDE AL CUESTIONARIO (20% de la nota del tema 5): importante que pongáis vuestro nombre, apellido y curso donde se indica, si no no sabré quiénes sois ni podré poneros nota.  Si hay algún problema con el cuestionario poneos en contacto conmigo. 

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